El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha publicado una actualización informativa sobre la situación de la Peste Porcina Africana (PPA) en España, tras la confirmación de varios focos en Cataluña durante el año 2024 y la posterior evolución de la enfermedad. Aunque España continúa considerada “País Libre” en el ámbito comunitario, el control de los últimos focos ha requerido la aplicación de medidas excepcionales que afectan directamente al sector porcino y al trabajo veterinario diario.
Desde el Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Badajoz consideramos importante poner a disposición del colectivo colegiado los aspectos más relevantes del informe, dada la trascendencia económica y sanitaria de esta enfermedad, así como su impacto potencial en Extremadura, una comunidad de referencia nacional en la producción porcina.
Situación actual de la PPA en España
Los últimos focos detectados afectaron a explotaciones porcinas en Cataluña, con incidencia concentrada en zonas de elevada densidad ganadera.
Tras las actuaciones de control, no se han comunicado nuevos focos desde mediados de 2024, manteniéndose una vigilancia intensa en las zonas afectadas.
España conserva el estatus de “País Libre de PPA”, situándose en un escenario favorable para la exportación y el mantenimiento de los mercados internacionales.
Medidas de control aplicadas
El documento oficial recoge la aplicación de las medidas previstas por la normativa europea y nacional:
Sacrificio y eliminación segura de los animales afectados.
Establecimiento de zonas de protección y restricciones de movimiento.
Intensificación de la vigilancia activa y pasiva en fauna silvestre y explotaciones.
Refuerzo de bioseguridad y control estricto de accesos y transportes.
Estas actuaciones han permitido cortar la cadena de transmisión y evitar la expansión del virus hacia otras comunidades autónomas.
Implicaciones para la profesión veterinaria
La vigilancia y la detección precoz siguen siendo determinantes. En este escenario, la comunicación inmediata de cualquier sospecha clínica por parte de los veterinarios clínicos y de explotación continúa siendo el eje fundamental de prevención.
Recordamos que:
La PPA no afecta a las personas, pero su impacto económico es muy elevado.
La detección temprana depende en gran medida de la formación, criterio clínico y capacidad de alerta del veterinario en campo.
Extremadura, por su peso ganadero, requiere mantener una bioseguridad estricta, especialmente en movimientos, transportes y manejo en explotaciones porcinas.
Recomendaciones operativas para las explotaciones en Extremadura
Extremar el control de accesos y visitas.
Reforzar medidas de desinfección de vehículos y materiales.
Evitar el contacto del ganado con jabalíes y fauna silvestre.
Mantener registros actualizados de movimientos internos y externos.
Comunicar cualquier signo compatible sin demora.
El mantenimiento del estatus sanitario frente a la PPA en España es el resultado directo del trabajo coordinado entre administraciones, veterinarios y sector ganadero. En un contexto internacional donde la enfermedad continúa activa, la vigilancia profesional y el cumplimiento riguroso de las medidas de bioseguridad siguen siendo esenciales para proteger la estructura productiva porcina de Extremadura y del conjunto del país.
