Tecnología y ecología animal
Durante los últimos años, gracias a los diversos avances en técnicas de detección y comprensión de movimiento animal se han podido recopilar multitud de datos (cada vez más precisos) acerca de la ecología de multitud de animales salvajes.
Estos conocimientos sobre la ecología de los animales silvestres pueden sernos realmente útiles a la hora de reducir los conflictos que puede generar la actividad humana con la faunística, permitiendo anticiparnos a la creación de dichos conflictos y establecer así un mejor funcionamiento de los ecosistemas que nos rodean.
Un artículo publicado por la revista “Science” asegura que el movimiento afecta a procesos ecológicos y a la capacidad de los individuos para hacer frente a los rápidos cambios ambientales provocados por el hombre. En dicho artículo se realizó una revisión sobre las tecnologías empleadas para la captación de información acerca de los movimientos de diversas especies que habitan diferentes tipos de ecosistemas, registrando de esta manera mamíferos terrestres, aves e incluso peces.
El aumento de estos datos quizás se deba a que tecnologías que en un principio eran muy sofisticadas y de difícil acceso cada día se encuentran más instauradas en nuestro día a día. Otro de los factores que pueden explicar este hecho es la facilidad y la familiaridad que mostramos a la hora de manejar complejos dispositivos tecnológicos que como se mencionaba antes también están más instaurados en nuestras rutinas.
En lo que al estudio se refiere, una tecnología que destaca por su capacidad de producir grandes datos sobre movimiento faunístico de manera rentable es la conocida como “reverse-GPS”. Este sistema requiere de una captura previa del animal para colocarle una pequeña etiqueta que se encontrará adherida al animal y que irá emitiendo en un corto espacio de tiempo, permitiendo conocer de manera precisa los movimientos del animal. Este método se empleó para observar la interacción que mantenían los murciélagos frugívoros con las aves de su mismo ecosistema, y como se repartían los espacios aéreos para buscar alimento.
Otro estudio, realizado para analizar la interacción que mantienen los salmones del atlántico, al subir los cauces de los ríos para desovar, con las anguilas, especie en peligro de extinción cuando desciende por los cauces. Este estudio mostró un aumento de la mortalidad de ambas especies en la época en la que coinciden con mayor frecuencia en los caunces fluviales debido, en principio, al aumento de competencia a la hora de buscar alimento.
Como bien demuestran estos y otros muchos estudios elaborados tanto en territorio nacional como internacional, la ecología del movimiento de las especies está creciendo día a día y ampliando las fronteras científicas, proporcionando mejores oportunidades para la conservación de las especies salvajes, además de destaparse como una herramienta fiable a la hora de estudiar la ecología animal en grandes superficies de terreno y en una amplia variedad de ecosistemas.
