El uso de drones para controlar la entrada de jabalíes a explotaciones ganaderas
Hoy en día, el control de la entrada de ungulados silvestres a explotaciones ganaderas de carácter extensivo es una de las tareas pendientes en algunas comarcas de Extremadura y de otras comunidades autónomas en las que existen también elevadas poblaciones de estos animales salvajes.
La transmisión de enfermedades de naturaleza parasitaria o infectocontagiosas como la peste porcina africana, popular en estos días por haber alcanzado el norte de Italia, o de la tuberculosis bovina, enfermedad endémica en nuestra región, ocasiona importantes pérdidas tanto a nivel productivo como económico a los ganaderos.
Así, con la presencia de elevados grupos de población de jabalíes, principales transmisores de enfermedades al ganado bovino, ciervos y otros ungulados, se hace más que necesaria la innovación e investigación en medidas de bioseguridad que permitan identificar puntos de acceso a las explotaciones o estima de poblaciones de estos animales salvajes no deseados en explotaciones ganaderas destinadas a la cría en extensivo.
Son varios los grupos de investigadores que han utilizado el uso de drones que incluyen cámaras térmicas que les ha permitido identificar poblaciones de animales además de ofrecer un fiel contenido a la hora de describir los patrones de movimiento de las especies estudiadas.
La gran aceptación de los drones para la realización de estas tareas viene dada en gran parte debido a la capacidad para cubrir rápidamente grandes áreas en comparación con otros métodos tanto de estima de poblaciones como de análisis de interacciones entre ganado y fauna salvaje. Permiten obtener grandes cantidades de imágenes, para cuyo análisis es posible emplear sistemas manuales, pero se prestan bien a análisis automatizados mediante algoritmos de aprendizaje automático. Esta última variedad de detección es más rápida y en ocasiones más precisa que la manual facilitando el recuento de los animales implicados.
Por otra parte, el uso de drones unido a cámaras térmicas presenta limitaciones importantes, principalmente en cuestiones económicas, pues pese a que en los últimos años esta tecnología ha sufrido significantes bajadas de precio, su utilidad continúa ligada a la definición óptica de la cámara y a la autonomía de la batería del dispositivo, además, su utilidad puede verse disminuida en función de las condiciones climatológicas, ya que no siempre son óptimas y la calidad de la imagen puede verse en este caso afectada.
Actualmente, el uso de drones se ha mostrado efectivo a la hora de localizar puntos críticos para la interacción de fauna silvestre y ganado doméstico, como así lo demuestran estudios realizados en campos de cultivo en Japón y sin necesidad de irnos tan lejos, los estudios realizados en el Parque Nacional de Doñana para controlar la transmisión de bacilos tuberculosos entre poblaciones de animales. Por lo tanto, podemos decir que el uso de drones se erige como una herramienta útil a la hora de analizar la ecología de las especies, así como un elemento que puede resultar clave en materias de bioseguridad.